Pintar paredes con efecto rústico

Los ambientes rústicos son perfectos para determinadas viviendas, especialmente las casas de campo. Aunque han perdido terreno respecto a los espacios de estilo moderno (hace unos años se veían incluso en pisos en la ciudad), lo rural sigue estando de plena tendencia en su medio de siempre: los pueblos. Por eso, si eres el afortunado dueño de una de estas casas que nos recuerdan el pasado puedes animarte a dar un acabado a las paredes acorde con su carácter.  Aquí te contamos cómo…

Las paredes son, sin duda, una de las cosas que imprime más carácter a las casas de campo. En función de la tipología de casa, es posible ver acabados encalados, en piedra natural o de imitación, en ladrillo gastado… Pero la pintura extendida de forma irregular es probablmente la opción que mejor enfatiza el carácter rural de una casa.

Son muchas las marcas que disponen de este tipo de pinturas de alta decoración fáciles de aplicar para aficionados. La ventaja es que al tratarse de acabados irregulares difícilmente pueden terminar en un resultado mediocre.

En este caso vas a ver la aplicación de una pintura de Hempel (Rustik) acompañada de cera decorativa. Se trata de un revestimiento de aspecto mineral espeso que viene en forma de polvo. Una vez mezclado con agua y aplicado con la técnica que te vamos a explicar, proporciona un acabado rústico muy creíble.

Aunque hay diferentes colores, ten siempre en cuenta que son los de tonos  terrosos, amarillo, mostaza, ocre, óxido los que mejor se adaptan al estilo rústico. La textura de la pared debe ser ligeramente rugosa y debe estar limpia, seca e imprimada con un sellador adecuado (pregunta en tu centro de bricolaje).

La pintura, paso a paso

Lo primero es verter el polvo en el agua  (2 kg por cada litro) y dejar reposar 15 minutos antes de comenzar a usar (paso  1).  Luego hay que aplicar sobre paneles de  5 m2 con llana de plástico, acero inoxidable o brocha (paso 2). Para acentuar el efecto antiguo, mueve la llana o brocha en diferentes direcciones. Termina alisando ligeramente para que no queden crestas (paso 3). Deja secar 48 horas y aplica la cera decorativa con una paletina o brocha plana sin mango (paso 4). Progresa de abajo arriba de forma regular. Pasadas 48 horas se puede dar lustre a la cera con un trapo de lana o cepillo de lustrar.

Fotografías: Hempel