Bodegas Cepa 21

Firmes en su propósito de seguir sorprendiendo al mercado, los propietarios de las emblemáticas Bodegas Emilio Moro, en Ribera del Duero, quisieron empezar el siglo XXI con la creación de una nueva gama de vinos "con una fuerte presencia varietal", en un edificio moderno y minimalista, con restaurante incluido, pero sin olvidarse de sus raíces.

Así nació Bodegas Cepa 21, el proyecto más personal de la tercera generación de la familia Moro, con el que buscan lo que sugiere su nombre: elaborar vinos de "pura cepa" acordes con las tendencias y el público del siglo XXI.

A su buque insignia Cepa 21 -vino de 14 meses en barrica- y el joven Hito -con 8 meses en barrica-, se sumó el año pasado su etiqueta más Premium: Malabrigo, un vino nacido de un viñedo muy especial, llamado a convertirse en referente absoluto de calidad de los nuevos riberas.

Malabrigo 2010 es un vino de terroir procedente del pago del mismo nombre, una finca singular que presenta una climatología dura, con contrastes térmicos extremos que permiten maduraciones prolongadas del hollejo y aportan cuerpo, fruta y complejidad al vino. Elaborado100% con el más puro clon de la Tempranillo, la Tinta Fina, y envejecido durante 21 meses en barricas de roble francés, esta segunda añada reafirma la excelente calidad y marcada singularidad de la primera añada gracias a las lluvias del invierno y las altas temperaturas estivales de un muy buen año en lo meteorológico.

Malabrigo 2010, se presenta con un intenso color rojo picota, muy cubierto, con ribetes violáceos de juventud, que augura un lento envejecimiento y un expresivo aroma a fruta negra confitada, con una marcada presencia de notas especiadas, carmín y tinta china. Los matices torrefactados se integran con los aromas primarios ofreciendo un conjunto de gran personalidad y nobleza. En la boca es sedoso y envolvente, con una marcada persistencia en el final de boca y un postgusto largo donde podemos volver a disfrutar de matices a fruta especiada.