Restaurante Tribia de Can Bonastre

Tribia es el restaurante gastronómico de Can Bonastre Wine Resort. La finca, que este año celebra sus 460 años, se encuentra a 35 minutos de Barcelona en el municipio de Masquefa (Anoia), en un paraje rodeado de viñedos al pie de Montserrat.

En él los comensales pueden encontrar además de una gastronomía de calidad, un ambiente tranquilo y un servicio excelente. Su ambiente es sobrio y elegante y la decoración de vanguardia domina toda la estancia. El nombre de Tribia hace referencia a una variedad de uva blanca muy utilizada en Cataluña en la Edad Media para la elaboración de vino.

A partir de la pequeña bodega familiar, en la que se empezaron a comercializar los primeros vinos hace diez años, la familia Vallès ha desarrollado este proyecto que combina tradición y modernidad. La finca se restauró recientemente, conservando los elementos originales y añadiendo todas las comodidades necesarias para convertirse en un acogedor cinco estrellas que cuenta con 12 habitaciones, un spa y dos restaurantes.

Los vinos, que se elaboran en la bodega de la masía, encuentran el maridaje perfecto con la cocina de Víctor Gómez, el chef del restaurante. Su objetivo es proporcionar la máxima calidad siempre fiel a la cocina catalana tradicional con un toque moderno y creativo. Su cocina se basa en los productos naturales de la tierra y de temporada, reinterpretando algunas recetas ancestrales.

Destacan entre sus creaciones culinarias las faves a la catalana, la cake de chicarrón, la ganache de butifarra negra y la sopa de menta; la coca de recapte con vieiras, jamón, alcachofas, y ajo tierno; el suquet de rogers amb joc de tubercles; las albóndigas de pies de cerdo con caracoles y el tataki de atún con juego de pimientos.

Además de la producción de vinos de gran calidad (Nara Crianza 2003, Maurel 2006 y el Pinot Noir) en Can Bonastre se elabora un aceite exclusivo para los clientes del hotel y del restaurante. Se trata de Na Joana, un aceite extra virgen elaborado con aceitunas arbequinas cultivadas en la misma finca y con una graduación de 10,2.

La apuesta por el enoturismo también se deja ver en actividades para clientes, como visitas guiadas por la bodega y las viñas, iniciación a la cata de vinos, vuelos en helicóptero por la zona y excursiones por las comarcas del Alt Penedés y el Anoia.